El mausoleo de los Antiguos (Priv. Temperance)

El comienzo.

5 de Mayo del 2014

10.00 pm

Parque central de la Ciudadela; Brooklyn Heighs

Esa tarde habia pasado tranquila, en el mismo coche que me llevo al baile me dirigi hasta la ciudadela para tomar algunos documentos del departamento que habia sido destrozado por mi anteriormente, abri la cajuela y lance todos esas carpetas con expedientes secretos en aquel lugar para cerrarla de cuajo. Luego me subi al vehiculo y puse algo de Jonny Cash en el sintonizador de radio cuando ya daban los diez minutos para que fueran las diez de la noche, me esmere de sobre manera para ir presentable al encuentro, de todas formas la chica habia demostrado mucho interes en el baile antes de que ocurrieran todos esos tumultos, me hubiera gustado que nos hubiesemos conocido en circunstancias mas pacificas, pero a veces el destino actua de distinta manera, esa era la mayor de mis quejas, el paradigma entre la voluntad y el destino siempre luchaban dentro de mis convicciones, pero hoy no era tiempo para hacer caldos de cabeza mientras conducia por la carretera hasta llegar al parque central de la Ciudadela.

Estaba todo realmente tranquilo, los pastos verdes se batian al viento en un compas bastante oscilante, y alguno que otro arbol se levantaba cerca de un riachuelo, un paraje de naturaleza en medio de todos los edificios, uno de ellos tenia un restaurant de comida rapida, no me habra tomado menos de unos minutos antes de que dieran las dies en punto para comprar un bocadillo en ese lugar.

Sali rampante cruzando la calle con cuidado de evadir el trafico mientras mi gabardina se batia al viento cuando los focos de cada automovil alumbraban mis pasos en aquel paso peatonal, y regrese al parque tan rapido como era posible. Deje el coche estacionado frente al parque central, y apoye mi espalda sobre la puerta del chofer cuando abria la bolsa de papel que contenia unos hotdogs con mostaza y comence a comer uno de ellos mientras ya era hora de que la chica se apareciera por el lugar, en el asiento del conductor, estaban las carpetas con expedientes que habia guardado con sigilo anteriormente, era una buena forma de darle una sorpresa a una espiritista interesante, un blanco que no podia dejar pasar facilmente...

Aquella nota en su escote marcaría sus pasos luego de aquella extraña noche de Walpuris. Había salido herida, debilitada más bien luego de enfrentar con los horrores que en esa noche intentaron traer más muerte de la que ya había en aquel mundo. Luca había cuidado de ella, llevándosela con él, protegiéndola y buscando que sanara. Pero Temperance estaba más mentalizada en aquella nota, ne aquel extraño ser que se tomó tantas molestias para dar con ella.

Debía ser algo demasiado importante, algo crucial en su vida, porque aquel licano no sólo habia hecho todo aquello para dar con ella, sino que además, conocía sobre su pasado. Intrigante, peligroso, y una trampa si veía aquella dirección. La posibilidad de ser atrapada por los militares, encerrada o asesinada de paso, sera demasiado cierto. Era un mal lugar donde Temperance podría aparecer, pero la intriga era demasiado. La imagen de aquel licano, de su aura rondaba a aquel hombre que se había marcado a fuego en sus pensamientos.

Obviamente no podría contarle a nadie sobre sus plabes, aquella nota la había guardado porque seguramente le prohibirían, arriesgaba demasiado, pero ella, fiel a esa tozudez extrema, no daría pie atrás, y cuando logró ponerse de pie, tomó su motocicleta y fue ne busca de su destino, detrás de aquel licano misterioso que había mencionado algo de ella que era tan desconocido para muchos que le sorprendía que lo supiera. Vladimir y Everett eran las dos únicas personas sabían que sufría de aquella enfermedad, ellos dos tan sólo sabian que ella a veces se perdía, que su mente se apagaba. Fue el miedo de ambos que un buen día, ella no volviese mas.

Lastima que ninguno de los dos estaba en la vida de la joven como para advertir que aquella reunión sería mucho más de lo que Temperance podría soportar, o no?...

Llegó cerca de la primera frontera de la base humana, a partir de ahí, podria moverse con cierta libertad, pero sin despertar sospechas, porque hasta ahí, pasaba como un chico normal. Claro, se habia vestido de chico, con ropas y un abrigo que la cubría. Se veía como un chico pequeño y delgado, pero un chico a fin de al cabo, con aquel bigote sobre sus labios, y así, pasar desapercibida. No era para menos, era la causante, y para los humanos, culpable de todo lo que estaba pasando.

como pesaba aquello en su vida, y en sus actos, despachando demonios al infierno para poder expurgar su alma de los pecados que había cometido en el pesado, incluso, sin que ella fuese el artífice de aquel desastre.

Ya iba acercándose al punto de reunión, nerviosa, mirando a todos lados, echando sus manos a los bolsillos de un pantalón mas anchos- Miraba a todos lados y fue a sentarse en la cuneta de uno de lo locales cerrados, con las manos cerca de su cara, solo esperando alguna señal de que pudiera presagiar lo que en aquella noche pasaría.

Estaba fuera del vehiculo comiendo mi hot dog tranquilamente, esperando frente al parque que la cita se concretara, mientras miraba indiferente a mi alrededor, sin pretender levantar sospechas a nadie, sabia que podian vigilar si cometia algun error, mas que nada, haber sido el arma secreta del estado de Norteamerica casi todo el siglo XX tenia su karma... ahora que sali de prision era un karma doble, por alguna extraña razon los politicos pensaron que mi forma Crin era mas letal que la Bomba Atomica en Hiroshima y Nagasaki, quizas tenian razon.

Hubo apenas unos instantes en que deje de masticar mi merienda ya que las fluctuaciones en el aire cambiaron radicalmente, susurros y ecos ilegibles sonaban por doquier, me erizaba la piel... ella... me puse a olfatear el aire, ese olor a flores me era bastante inconfundible desde que habian corrompido Elysium... en esa habitacion... era ininconfundible ese aroma a mujer.

-Tempy... has llegado...

Camine en direccion sur siguiendo mi olfato ya que ese olor estaba grabado a fuego en mi memoria, y mientras continuaba masticando aquel hot dog caminaba a paso firme las cuadras que rodeaban al parque, hasta que el olor me gui a un menudo y delgado sujeto sentado sobre la banqueta de uno de los locales, bastante solitario.

-El festival de Walpurgis...

El taco de mis botines se hizo notar cuando caminaba justo en frente de el mientras se batia ligeramente aquella gabardina al viento, esperaba alguna reaccion ante mis palabras, si asi pasaba, efectivamente ese sujeto era realmente quien esperaba. Apenas ese tipo delgado de bigotes extraños alzo un poco la mirada le apunte con discimulo el vehiculo estacionado, esperaba que se diera cuenta que caminara junto conmigo hasta el coche y subirse en ese lugar para hablar con mas libertad de nuestros variados asuntos que debiamos discutir...

Sentada esperando al licano, y también atenta a que los militares no desearan hacerle un control de identidad y que eso la llevara a alguna celda de las que tenían preparadas para los espiritistas como ella. Estaba impaciente, sentada con las manos sosteniendo en su cabeza en una posición que parecía relajada, pero estaba atenta a los dos espíritus que la acompañaban y que estaba apostados cerca de ella para informarle sobre personas que se acercaran a la joven. Suspiró, y cuando pensó que ya era una locura estar ahí, y que el tiempo de espera había más que transcurrido, se puso de pie, dispuesta a largarse de aquella trampa para lobos, cuando uno de sus fantasmas se acerca y le informa que se acercaba un ser con un aura terrible.

-debe ser él...- susurró la joven en la medida que enfocaba su vista en el hombre muy alto que aparecía, era bastante más alto que ella, y corpulento. Aunque en el último año, ella había ganado dos o tres centímetros más, antes de cumplir ya los 21 años. Si, Temperance sólo tenía 20 años, y había vivido mucho más que varias personas.

De pie esperando alguna palabra del hombre, sólo recibió aquella frase que rememoraba aquella celebración que terminó tan terriblemente. Y le indicó el automóvil que estaba cerca. Temperance levantó una ceja, pero luego se puso de pie, caminando hacia el auto, y abriendo la puerta para subirse. Recordó las indicaciones de su madre de jamás subirse a automóviles de desconocidos, pero la instancia lo ameritaba. Ya arriba la chica lo miró de reojo, el gorro que llevaba, cubría su larga melena oscura, pero aquellos ojos la hacian inconfundible.

-antes de hablar, salgamos de este lugar - le indica, no iba a hablar nada más, mientras estuviera en ese sitio. Atrás de ella aparecieron los dos espíritus que la acompañaban.

- señorita Temperance, los militares estan cerca - dijo uno.

- si, Temperance, debes irte ahora - era Sebastian , que estaba detras de Temperance.

-debe sacarme ahora - indica, y fija sus ojos en el licano -por favor- susurró suavemente, mientras los espíritus traspasaban el capó del auto para ver por donde estaban los militares, aún no doblaban en la esquina.

La chica parecia agitada, nerviosa, miraba su alrededor cada dos por tres examinando cada detalle, era ironico ya que se suponia que el que habia trabajado como Agente encubierto en el pasado era yo, y hacia exactamente lo mismo que ella pero con un toque mas discimulado asi que mientras nos dirigiamos al vehiculo estacionado en el parque intente distender su evidente incomodida.

-Tranquilo Bobby... sabes?? te dare un consejo, en casos como estos debes actuar con mas naturalidad naturalidad, asi nadie se fija en ti...

Termine de comentarle a la chica, habia cambiado deliberadamente su nombre para seguir su juego de encubierta en aquel lugar, abri la puerta del copiloto para que se subiera tan rauda como podia y luego di la vuelta al vehiculo para abrir la puerta del chofer, claro... habian dos guardias, soldados rasos que se acercaban a un par de cuadras al sur con sus fusiles en las manos.

Silve una tonada y camine hasta uno de los basureros para arrugar la bolsa de papel y las servilletas que contenian adentro el hotdog, luego camine hasta la puerta del chover nuevamente y la abri de golpe para subirme acomodando la gabardina, Temp me miro con cierto congojo ya que sus amiguitos animas ya le habian advertido de lo que habia visto y parecia que tenia bastante prisa, estando dentro le tome de uno de sus hombros con cierta firmeza y suavidad a la vez.

-Hey! mujer! tranquila... se como manejar esto, ahora hazme caso y mirame a los ojos bien... pase lo que pase no te muevas de este asiento, quedo claro???

Arqueaba las cejas mientras la quedaba mirando fijamente esperando una respuesta de su parte, alli senti que alguien golpeteo el capo del coche, los militares estaban esperandome fuera del vehiculo, donde se encontraba la puerta del chofer, baje el vidrio lentamente y asome mi rostro para ver a ambos militares.

-Que sucede oficiales?? hay algun problema?? *sonrie*

-Su identificacion por favor...

-Ohh... debo excusarme señor oficial, acabo de perderla hace unos minutos y...

-Baje del auto *moviendo el cañon del fusil*

-De acuerdo señor oficial...

En un momento de tension abri la puerta y baje del choche con bastante tranquilidad, la chica podia ver como hablaba con ambos militares, en un instante uno saco un radio de uno de sus bolsillos, y la chica con algo de estupor vio como una rafaga de sangre mancho el parabrisas, un grito de hombre se escucho y se podia ver como le tome el cañon del arma para apuntarlo hacia arriba mientras disparaba con la garganta perforada por mis garras... el soldado con la mirada palida y perdida miraba a su asesino vestido de negro mientras escupia borbotones de sangre. en un instante giro la mirada hacia la muchacha dentro del vehiculo como pidiendo ayuda, baulbuceando con las garras de mis manos incrustadas en la garganta, como si intentara balbucear, y en un instante jale las garras de su garganta y su cabeza tal como si fuera un balon de futbol salio disparada de su cuerpo, la cabeza del soldado cayo sobre el capo del vehiculo en un acto terrorifico bastante cruel, los ojos de esa cabeza parecian desorbitados y los labios tenian la sangre fresca y algo coagulada, aun tenia puesto el casco y el color de piel ya lo tenia totalmente palido, justo frente a la chica cayo esa cabeza, y en unos segundos las garras ensangrentadas de una de mis manos se posaron en el craneo del soldado y la tomaron como si fuera una pequeña sandia para quitarla del lugar.

Luego meti la mano por la puerta del chofer, la mano aun totalmente ensangrentada... para jalar una palanca y abrir el maletero del coche... Habran pasado unos minutos quizas, y se sentia como silvaba una tonada melodica con mis labios, tal como si fuera algo normal, cuando agarraba de los pies ambos cuerpos de esos militares hasta el maletero, se sentia los amortiguadores del vehiculo rebotar cuando eran depositados uno por uno como sacos de verduras y de un solo golpe se cerro la tapa del maletero.

Los pasos lentos de mis botines resonaban sobre el asfalto hasta que abri la puerta trasera de pasajeros y lance una bolsa de plastico ensangrentada, cuyo contenido era una silueta esferica, eran dos esfericos ensangrentados, con restos de cabello, y cayeron en el tapete del piso del asiento trasero como si cayeran dos piedras livianas en ese lugar.

Acto seguido de un portazo cerre esa puerta y abri la del chofer para subirme de nuevo, jalando una palanca para que los parabrisas funcionaran y los chorros de agua se mezclaran con la rafaga de sangre que cubrio el parabrisas hasta diluirlo.

-Eres una niña buena Tempy, no te bajaste... ahora larguemonos de aqui antes que lleguen los refuerzos...

Reia con una carcajada algo enferma, sutil y siniestra cuando posaba la mano ensangrentada sobre la parte alta del volante, apague los parabrisas y encendi el motor enseguida. Despues quite la mano ensangrentada del volante para lamerla un poco y desviaba la mirada hacia el cielo...


-Que lastima, eran apenas unos soldados rasos de rango muy bajo, los reclutan a los 17 y esta debia ser su primera mision... hay cielos!... pobres chiquillos, pobre familia... me pregunto si la tienen... je je je je...


Comentaba bastante irrespetuoso mientras el auto comenzaba a moverse para salir de la ciudadela, cruzando un paso bastante poco vigilado hasta una carretera desertica en direccion a una larga travesia a State Island

-Cariño... no te olvides ponerte el cinturon...


Llegaron hasta un desertico lote baldio, donde habia un basural rodeado de autos viejos, cuervos y buitres por doquier, carrocerias de vehiculos todas estropeadas y abandonadas, neumaticos viejos y desgastados, alguna que otra rata paseandose entre cada agujero, alli estacione el vehiculo en medio de ese paisaje poco romantico, con el maletero apuntando hacia un barranco, no habia nadie alli... era como un punto limite entre el territorio de los Garras Rojas y el territorio de los Crotanos, le indique a Tempy que se bajara mientras jale la palanca para que se abriera el maletero.

-so darling... darling... stand by me... ooo stand... stand by me... *cantando*


Al abrir el maletero, saque un cuerpo de uno de los militares sin cabeza primero y lo arroje al barranco como si fuera un trapo viejo cualquiera, se sentia en el fondo como iba dando tumbos sobre la tierra mientras seguia cantando y tarareando, luego tome de una bota el segundo cuerpo para cargarlo sobre mis hombros para repetir el procedimiento mientras cantaba tranquilamente...

Bajo aquel barranco habia una montonera de cuerpos verdosos, algunos putrefactos y bien hinchados, rodeados de un hedor insoportable y un enjambre de moscas que se posaban en cada una de las cuencas sin vida de esos cuerpos con harapientas y viejas ropas desgastadas por el sol. Alguno que otro intestino era jalado de cada extremo al verso como los buitres se peleaban por ese pedazo al caminar entre aquella enorme montonera de cuerpos. Sonriea a la chica que parece que ya se habia bajado del vehiculo mientras abria la puerta de los pasajeros y tomaba la bolsa misteriosa.

-A volar!!! upa!!

Exclamaba cuando sacaba una de las cabezas y las lanzaba al aire como si una piedra la lanzara a la nada, luego de un instante se sintio como rebotaba entre las latas de cada vieja carroceria a lo lejos, mientras la otra cabeza la colocaba en el piso sobre la tierra y la pateaba como un balon de rugby para luego sentir como iba danto tumbos entre las latas viejas.

- Y llega el mariscal de campo Creed por la yarda nº 14 !! se asoma ante la porteria, patea!!! *pateando la cabeza cercenada* ....y aaaaanoooootaaaa!! *empuñando una de las manos al aire*

En seguida me gire a donde estaba la chica que parecia estar aun algo incomoda, sacudiendo mis manos con cierta tranquilidad, agachandome un poco para sacar un folio del asiento trasero y dejarlo sobre el techo del automovil, estire un poco la mano manchada con sangre coagulada para acariciarle uno de los cabellos a la chica, que se le asomaban bajo la gorra pero me di cuenta que tenia la mano manchada asi que hice un amague para alejarla mientras mantenia una sonrisa infame sobre mi rostro.

-Veras preciosa, he investigado mucho sobre la relacion que existen entre los cuadros de epilepsia y los viajes astrales... supongo que eso te suena bastante... he notado ese dia de la fiesta, por cierto, te veias preciosa con ese color rojo tan dulce *le lanza un besito al aire* bueno como decia... ese dia de la fiesta habia notado sobre tu labial , la comisura de tus labios estaba levemente agrietada, eso clinicamente podria suponerse como un desgaste propio de reflujo por alguna acides, ya sea provocada por algun tipo de estres, cancer gastrico ulcera, o alguna regurgitacion producto de algun ataque epilepsico, queria confirmar que se trataba de eso, y cuando lo mencione para acordar nuestra cita abriste los ojos de par en par en un reflejo casi imperceptible... el cerebro entiende y reacciona a algunos estimulos manifenstandolos en un lenguaje corporal bastante sutil, en ese caso... *se toca la barba* ese gesto de tus claros y preciosos ojos verdes era el equivalente de decir "si, tengo cuadros de epilepsia, como lo sabes??" ... hahahaha... no solo tengo talentos adivinadores primor... es cosa de observar, e investigar... *abre el folio* como esto de cientos de casos sin explicacion donde espiritistas de un gran potencial sufren de ataques de esta naturaleza, un patron que se repite a lo largo de la historia... segun algunas teorias puede deberse misticamente a un colapso del poder de la mente, otra teoria dice que puede ser cuando un espiritista aumenta su nivel de poder espiritual sufre ciertos colapsos que lo vuelven mas versatil y fuerte, y otra teoria menciona que es... digamos, el efecto secundario que se produce por desarrollar una tecnica... el viaje astral... *la contempla a sus ojos claros y verdes*... eso fue lo que logre recopilar de los expedientes de muchos espiritistas registrados en este pais, algunos expedientes a manos del Pentagono, pero el que mas me llamo la atencion, fue el que robe de la caja fuerte de la residencia del General Madison, en aquel entonces, director de Seguridad Nacional justo en la epoca donde los portales se hicieron populares, donde los aviones con miles de cuerpos sin vida fueron encontrados en diferentes casos, y justo en la epoca del Desastre del Winter Festival... *suspira sin perderle la mirada*...el expediente que conservaba el general era el tuyo... *se lo muestra* ohh!! esta cita me encanta... *se pone a leerlo* dice asi: "Señor Presidente Obama, solicito la captura Internacional de Temperance Brunswick, una alerta de busqueda sera emitida dentro de las proximas horas en cada linea segura y en los afiches de Interpol."...fin... debes ser muy famosa para que los militares te busquen a ti cariño, por eso estoy aqui... *sonrie maliciosamente*

una escena dantesca es la forma de calificar lo que había pasado cuando los dos militares se se acercaron al licano para pedir sus antecedentes. Temperance realmente estaba a punto de salir corriendo del árbol, y alejarse de aquel lugar cuando más rápido pudiese, pero lo que sucedió luego fue mayor a sus capacidades, la sangre esparcida como si de agua se tratase y el autor, aquel ser de las sombras ante el cual estaba casi desvalida. Tensa como nunca, pensó en salir del auto, pero a pesar de acabar con los demonios, sus nerviosos no estaban preparados para lo que en ese momento vío y esta fue la razón por la que no se movió del automovil, no por la orden que le diese, sino por el pavor que le produjo ver la sangre y los cuerpos destruidos por las garras del animal que tenía delante de ella.

Monstruoso, un ser de las sombras, aun más cruel que cualquier Cainita, porque parecía no dscriminar en la forma de matar. Pegada al sillón y en silencio se quedó, incluso cuando el licano se subió al automovil, con el olor a sangre y a infierno envolviéndolo. Ahora sentía la necesidad enorme de salir corriendo de aquel lugar, pero el licano echó a andar el auto sin un rumbo claro. Las casas iban dejándose atrás, los altos rascacielos, antes emblemas de un mundo distinto y lleno de vitalidad, ahora no eran más que los pálidos fantasmas de lo que fueron. Oh, los fantasmas de los militares, detenidos delante de su asesino, aún estaban en su mente.

No lo miró, apenas respiró, tensa y preocupada, nadie más sabía que estaba ahi, con aquella criatura. Y lo peor, sola se había metido en aquel problema. Repasaba esto junto con memorizar el camino hasta cuando llegaron a un punto fronterizo, entre la zona humana y la zona cero, uno de los puntes que unía aun la isla de Manhattan, con el resto de New York.

El licano se encargaría de los cuerpos, aquel sitio apestaba a muerte, y el ambiente era tan perturbador que produjo una terrible angustia en Temperance, que agito su pecho. Intentó no presenciar la manera inhumana en que dispuso de los cuerpos de sus últimas victimas, y descompuesta, sintió ganas de vomitar, Era el ambiente tan cargado de muerte que la hacia reaccionar así. Cuando levantara la vista, tendría al licano encima de ella, apunto de tocarla y si no fuera por el auto, hubiera dado unos pasos hacia atrás, escapando de él.

Y el hombre comenzó a hablar, con un expediente en las manos, luego le revelaría que aquel expediente era de ella, era la información que los militares tenía post al carnaval de los cerezos del año pasado, en donde casi pierde la vida. Lo miró con suma atención, dentro de lo que podía su cuerpo resistir. El desconocido seguía hablando de ella, y de los viajes astrales, lo seguía mirando, de todas formas debería corregirlo, nunca antes se habían abierto portales hasta sino aquella noche de verano, en medio del carnaval de los cerezos.

Cuando dejó de hablar, Temperance se cruzó de brazos, y miró el expediente y luego los ojos del licano.

-ha hecho un gran trabajo- espeta, y comienza a retroceder -aunque nada de lo que dijo me es desconocido, además, ese expediente no es más que un intento de los militares de retenerme, pero como sabrá, ahora no hay ningún gobierno que se interese en atraparme - además, Pietyr había conseguido un trato con ellos por su libertad -¿debía sorprenderme?... el asunto es que aún no dice que desea, y yo la verdad no estoy para estos juegos, no se preocupe, sé como regresar por mis propios medios - le hace un gesto con la mano para alejarse, realmente deseaba salir de ahí, de ese olor que la mareadaba, Le dio la espalda y se alejo de él, más consciente de lo que debía que aquel ser podría acabar con ella, pero más interesada en alejarse comprendiendo que había sido una pésima idea el haber aceptado aquella "invitación".

La chica tal como habria deducido antes, estaba indignadisima por mis costumbres poco ortodoxas y parecia alejarse del lugar rauda y campante como si intentara huir de alli, fue en ese minuto que extendi el brazo para capturar su femenino antebrazo en un sutil reflejo, aprisionandole aquella parte del cuerpo para acorralarla contra la carroceria del coche, olfateando sutilmente la mejilla de la muchacha, dandole luego una lamida con esa demoniaca y serpentil lengua.

-Aun no he terminado Tempy... no te vayas justo en la mejor parte... observa bien...

De manera siniestra y provocativa dejaba de susurrarle para plantarle un timido besito en su mejilla, soltarle el antebrazo y caminar a unas dos torres de carrocerias viejas apiladas unas encima de otras. Extendi los brazos con sus respectivas garras para sostener una de las carrocerias de la base y lentamente la torre comenzo a tambalearse hasta caer en una estruendosa sonajera de latas bastante ensordesedora escoltada de una enorme polvareda, luego repitio el proceso con la otra torre.

-Mira esto Tempy...

Exclamaba al salir de la tremenda polvadera que se levanto ante tantos derrumbes y le apunte a mis espaldas mientras iba en busqueda del folio con los expedientes carraspeando un poco por el espectaculo.



-No te parece Increible???...

Le comentaba al apuntar aquella fachada, parecia un umbral de piedra hacia unas catacumbas, una caverna realmente antigua, una apetecida adquisicion arqueologica que mantuve oculta en tan inmundo basural, cuando la polvareda parecia disiparse le entregue un par de linternas a la muchacha para luego caminar hacia la fachada de tan antiguo templo...

-Esto debe ser tan antiguo como lo es la esfinge, si te fijas en la piedra tiene texturas de erosion por agua, lo que probablemente se construyo en un milenio donde los contientes debieron estar juntos y luego la civilizacion que construyo este umbral desaparecio en un diluvio... los antediluvianos... no te parece conocida esa historia?? adentro hay mas curiosidades... incluso espirituales que pense te podria interesar *parandose en la entrada de la caverna, en el enorme marco de piedra desgastada y tallada en ilegibles geoglifos e imagenes de lobos, reptiles, murcielagos y criaturas similares con cuerpo de hombre, muchas grafias del mismo tipo se alzaban por las paredes del lugar, y el licano le extendio la mano para que pudiera subir con cuidado por los debiles peldaños de tan tremenda escala*

Rauda en la huida, porque de otra manera no podía ser llamada la retirada que estaba ejecutando, Temperance estaba esperando una reacción violenta del licano, y ahí, dentro de sus posibilidades defenderse. el cómo sería un asunto con el que tendría que lidiar en el momento. Por eso no se sorprendió cuando sintió el jalón del licano, y como su cuerpo, carente de peso y resistencia, fue a parar a la puerta del auto, apresada entre este y el cuerpo del licano. ¿acaso no había alguna raza que la apreciara?. Vampiros, Humanos, y ahora los licanos, que la deseaban usar en oscuros asuntos que no lograba comprender.

Ora vez en la misma posición, ella sin escapatoria, y él conteniéndola, se le hacia demasiado trillado, y peligroso, ahora cuando el licano se acercó más a ella, hasta besa su mejilla, cuando ella volteó su rostro. Odiaba que entraran en su espacio privado, que la tocaran, que la hicieran sentir vulnerable... es una reacción natural de una persona de la que ya habían abusado en varias ocasiones. Pero el licano solo buscó un beso en su mejilla, y de ahía seguiría hablando como si amara el sonido de su voz.

Y ante sus ojos aparecería un templo... un templo egipcio en medio de New York, Temperance dio unos pasos hacia atrás, más que asombrada de lo que sus ojos contemplaban. Debía ser una réplica, puesto que eso no tenía ningún sentido. Pero el Licano estaba seguro de que si era real y la invitaba a bajar, ella levantó una ceja, incrédula, había aprendido que cuanta más desconfianza tuviese era mejor para ella...

-¿que es eso?- preguntó sin avanzar, pero al final terminó dándo unos pasos hacia aquella dirección -¿es una réplica... ah... dios me siento mareada- llevó su mano a su frente, cada vez más abrumada por el ambiente de ese sitio -ha cargado este lugar de demasiada muerte, no puedo estar aquí, por mucho que tenga un templo,no... no puedo estar aquí - volvió a retroceder, realmente su cuerpo físicamente hablando buscaba alejarse de aquel sitio.

-debo irme- movió sus manos como quien se desentiende de algo, y le dio la espalda, para irse*

La chica estaba espiritualmente abrumada, en cierto modo estaba algo decepcionado, los rumores de pasillo siempre han comentado de su poder grandioso como espiritista, y con todo el peso en el ambiente su fortaleza espiritual estaba siendo mermada. Pensaba en mi interior... a esta mujer protegen indirectamente los chupasangre con cierto recelo??... vaya... deben estar realmente desesperados con sus artilugios que parecian ser realmente pobres si querian conseguir aquel objetivo que dedusco es el Infierno Azul o alguno similar, fusionar dos planos de la realidad se necesita una fortaleza integra...

-Bueno señorita Brunswick, debo confesar que pude olfatear su deseo de conocer a este Licano desde hace bastantes dias... *sonrie* a veces hay que tener cuidado con lo que se desea...

Le replicaba con cierto tono ironico, realmente era una manera de manifestar en cierto grado mi decepcion por esa chica, pero quizas tenia cierta razon... soy demasiado exentrico para algunos gustos espirituales femeninos...

-Pensaba adornar este lugar con flores y lavanda, pero me olvide de comprar las fragancias cuando ibamos camino a este lugar..y bueno...

Esperen un minuto, el camino?? le habre dicho que no tenia que irse por el sendero que estaba pisando sino por el del lado norte?? no se si se lo habia mencionado, pero ese piso con aquel subsuelo tenia muchas grietas, y si se exedia en peso podria ceder todo ese piso y... corri ligeramente para alcanzarla intentando recordar si lo habia mencionado anteriormente...

-Tempy no pises esa roca, debes irte por ese cam---

Apenas me acerque a ella y el suelo comenzo a ceder, maldicion!! ...se han abierto tremendas fisuras levantando mas polvadera y aquel temblor causo que las torres de carrocerias viejas adyacentes tambien se hundieran con ese debil piso, la chica estaba ahi en medio, no debia perder el tiempo pensando, di un salto para caer encima de Tempy mientra el estruendo se hacia mayor, el piso cedio desbaratando enormes rocas a su paso y alguna que otra torre de carrocerias viejas en un desarme bastante estruendoso y escandaloso, provocando que algunas parvadas de cuervos y buitres emprendieran el vuelo hacia el cielo gris cuando ocurrio tremendo derrumbe.

Hubo un minuto en que todo quedo en silencio, alguna que otra pequeña piedrecilla caia sobre un enorme cumulo de escombros en unas catacumbas que parecian enormes cavernas subterraneas con estalactitas colgando del techo, y las gotas de agua escuchandose caer lentamente a diestra y siniestra, en un instante algunos bloques de piedras y carrocerias de viejos vehiculos comenzaron a temblar y moverse lentamente, luego una explosion aparto dos carrocerias en una estruendosa trayectoria en el aire...

-Grrrroooaaaaaarrr!!!!....

Un rugido comenzo a reverberar en aquel lugar y mi figura macisa y toda empolvada se reincorporo de aquella polvadera mientras le sostenia de una mano a la espiritista, habia puesto la espalda para que las toneladas de fierro y roca impactaran mi espalda, sin que la chica recibiera daño, al menos parecia estar bien, un dolor en las costillas me hizo respirar algo agitado y me sente sobre una de las rocas que estaba a nuestro lado, cuando agache mi cara pude notar como caian gotas de mi sangre al piso, toque mi frente y de verdad tenia un halo de sangre sobre mi craneo, comence a toser por el polvo mientras escupia alguno que otro pequeño gargajo de sangre discimulando el dolor en sutiles muecas y quejidos imperceptibles al tocarme el vientre.

-Te iba a mencionar... q-que la salida esta por el norte... ungghhh... *evoca una media sonrisa*

Al sentarme, la polvareda parecia disiparse paulatinamente y a mis espaldas habia un sendero de escalones que seguramente daba hasta la entrada de la cueva, sin embargo eso no era lo mas inquietante... Enormes monolitos de piedra con figuras que causaban conmocion, similares a gargolas monstruosas, algunos de mas de 10 pies de altura, se levantaban imponentes ante el paso del tiempo, con sus formas mitad hombre, mitad lobo, mitad murcielago... algunos con cuernos... eran impresionantes, y se podia notar debido a la pequeñez de los escalones que por perspectiva se veian de esa forma ante las enormes estatuas iluminadas de manera tenue y sutil por el paso de la luz producto del enorme socavon que se produjo por la caida del subsuelo. Era un paisaje derroido por vagones de tren antiguos, instalaciones electricas sin funcion sobre pasillos desgastados en baldosas, escombros y oscuridad, era una estacion de la linea de lo que solia ser el Metro de New York.

-Tenia... algunas historias... pero no n-no te voy a obligar a quedarte...*sacude la mano* puedes irte. si escalas con cuidado los escombros, toma la direccion norte haia la carretera, y de ahi podras guiarte facilmente a tu... a tu casa... unnghh... *se reincorpora, pero al dar un par de pasos trastabillea y comienza a tambalearse, se apoya asi sobre una enorme roca aun sosteniendose el vientre y parte de las costillas con cierto discimulo*

Imagen de las estatuas:

El licano la habia arrastrado hacia el templo, y aunque habia deseado escapar, John no se lo habia permitido, pero a medida que se iban alejando del cementerio improvisado en donde el licano dejaba sus cuerpos, aquella sensación de pesadez se iba alejando, pero aquel sitio estaba cargado de otra cosa, y ahi comprendió... Debían irse de aquí, aquella edificación no era humana, ella edificación era... Pero Temperance cometería un error, al intentar retroceder, erraría en sus pasos y todo se vendría a bajo, en medio de mucho polvo y el crujir de mecanismos que se activaban cuando ella presionó aquella trama.

Cayendo, ella abrazó al licano, y al caer, estaría sobre él, en medio del polvo, tocio varias veces y se bajó de encima del licano, asqueda por el sabor de la tierra, e intentó colocarse de pie, Josh, estaba vivo y seguia hablando, ni así se callaba, pensó y se encaminó hacia él, porque cuando se disipó el polvo, pudo verlo, con la escasa luz qu había. Sacó su celular y alumbró, el licano tenía una brecha en su frente y parecía estar lastimado, las rocas que habían caído lo debieron lastimar, y además de la sangre.

Se giró, alumbrando con la luz de su celular las estatuas que estaban en ese lugar, y volvió donde John, tomandolo de los hombros y llevándolo a sentarse en el suelo, mientra que cerca miraba la herida que se habia hecho. Sacó su pañuelo, y lo pasó por la herida, los licanos sanaban rápido, pero de todas formas podian morir desangrados si la herida era demasiado grave.

-déjeme ver...- le pide, para que baje las manos y presionar la herida con su pañuelo para cortar la hemorragia -creo que ya no puedo retroceder - le sonrió, y miró otra vez a su alrededor -este sitio no fue construido por los humanos, su aura es distinta - toca las paredes hasta llegar a una de las estatuas y quedarse delante de ella, mirando sus ojos que un instante parecieron brillar.

- ¿que busca realmente aquí?- se giró hacia el licano, ahora más que nunca deseaba explicaciones -dígamelo ahora, pero sobre todo, deseo saber porque me ha contactado a mí - caminó de vuelta donde el licano que se quejaba de un dolor en sus costillas, se puso a su lado, y comenzó a tocar su torso -se ha... roto una costilla, necesita que salgamos de aquí para atenderlo - se miraron a los ojos y la chica, sonrió, aunque aquella sonrisa no rompió su gesto de preocupación -y.. gracias por ayudarme...- susurra, cuando siente una presencia helada que los observaba desde las sombras, se giró pero no había nada.

-este lugar está lleno... de malos espíritus, - susurró, aun sosteniendo al licano, en su mano derecha, su crucifijo quedó colgando, las cuencas se enrollaban en su muñeca.

Lentamente el dolor crecio sobre mi cabeza, ea como una horrenda resaca que literalmente me partia el craneo, fue alli que senti la delicada mano de la chica untarme la frente con un pañuelo, en cierto modo lamentaba que el blanco pañuelo se tiñera de rojo por esas cirscunstancias, apenas me puse a toser para capturar un poco mas de aire entremedio del tumulto provocado por tanto polvo en el ambiente.

-Es una larga historia... p-pero la resumire... ya que el expediente se me quedo en el auto... *evocaba una risa entrecortada por el dolor*

Me levante en ese instante mientras sostenia mi costado, me dolia bastante, sin contar que el aire se volvia pesado tal como ella pudo presentirlo, por ello me levante para alejarme un poco y senti su calida mano sostener la mia para ayudarme a no trastabillar mientras caminaba, sabia que el tiempo apremiaba.

-Temp, estuve muchos meses investigando...unghh... el origen de las razas de las criaturas de la noche...Vampiros y Licanos en su mayoria, no me creo ese cuento de Cain, y tampoco el cuento de los Elfos, veras... hace muchos años atras, c-cuando me transforme en lo que soy... fue por un error eclesiastico, no fue por la magia de los maricas Elfos... *comenzaba a reir entrecortado nuevamente por el dolor* eso me causo algunas dudas, ya que mi caso no calza con el origen licano... yo soy un espiritista con estudios demonologicos y bajo mi poder se encuentra una bitacora magica negra bastante poderosa, cuando estudie las fuentes informaticas de este libro me llevaron a la busqueda del Necronomicon y del Ars Goetia del Rey Salomon, que describian una raza de criaturas divinas que median mas de 15 pies de altura... tal como esas estatuas, con apariencia antropomorfica con tintes bestiales, similar a un murcielago y un canino combinado en estos casos... es curioso por que, estos gigantes aparecen en varios libros conocidos, ya sabe... la historia de David y Goliat, los Titanes Griegos, las Valkirias, la Palma de Buda... jejeje cof-cof!... estos gigantes se consideraban dioses en sus tiempos, pero con la proliferacion del Cristianismo en la Edad Media estas creencias fueron consideradas Herejias por lo que muchas de estas figuras fueron consideradas obras del Diablo al igual que otras divinidades de otras culturas, ya ve lo que paso con los indigenas Americarons, que los obligaron a creer en un Dios castigador y que impone justicia *escupe un poco de sangre* muchas de las estatuas fueron destruidas pero estas se conservaron en el anonimato durante todos estos siglos, muchas como la Esfinge Egipcia...

No es descabellado pensar en el diseño de estos Monolitos como si fueran estatuas de un templo uno Egipcio, o los Totems en las piramides Mayas, tienen la misma simetria que las estatuas Egipcias, como crees que pueden haber hallazgos verosimiles en sitios distantes??... hay una teoria no descabellada, un solo continente apenas separado por pequeños mares y una civilizacion sofisticada antes de que existiera la civilizacion humana, perfectamente el mito del paraiso y de Cain haya nacido de ese lugar... y la construccion de monolitos como esos hayan sido las casas de esas divinidades Gigantes que por algun experimento hayan creado al humano... este planeta tiene 4.500 millones de años, y apenas existimos hace 20.000 años... al menos esos 20.000 años fueron suficientes para los espiritistas de milenios pasados comprender que alli se alberga un gran poder, como la piedra filosofal alquimica, un eslabon perdido en la evolucion espiritual que pueda curar los males fisicos como si fueran un milagro, como los milagros del Nazareno... ya sabe... los espiritistas de estas culturas tenian fe de que si tenian la sabiduria y el contacto directo con esta divinidad, podrian regir con armonia el orden del universo, y pense... que tal si alguien con un talento innato viera esta fuente de poder, fuera capaz de purificarla y usarla para curar los males fisicos como la licantropia, el vampirismo o la epilepsia?? que pasa si... Unghhh!!... que p-pasa si los espiritistas que la siguen a usted señorita Tempy puedan obtener este poder divino para liberar a sus hermanos del yugo Cainita, ya que me consta que muchos de ellos son usados en macabros experimentos, y se les ha suprimido la voluntad para que trabajen para ese clan vampirico...

Guiaba la chica hasta las escaleras para que pisara con cuidado a pesar de que estaba bastante moribundo a cada paso que daba en esa eterna trayectoria de escalones con tal de salir a la superficie.

-Un militar, que vive en la ciudadela, es amigo mio... unghhh... uno de mis contactos, m-me conto que hubo una batalla en donde los vampiros usaron de arma a los espiritistas, por eso las fuerzas armadas contratacaron capturando a todos con la orden Presidencial y del Congreso... quizas la prision en donde me confinaron en los subterraneo del Pentagono estaba diseñada originalmente para ser como el Guantanamo espiritista... *comenzaba a reir entrecortado nuevamente* que vision tan cruel... pero eso puede cambiar si puede liderar a esos espiritistas y proteger los corazones puros que todavia se conservan en el ultimo bastion Humano... esto podria ser una cura espiritual para el vampirismo... p-pienselo bien... jejejeje

En un instante, se escucho una vibracion sobre las paredes que sacudio un poco de polvo de cada una de las rendijas que se marcaban entre los enormes bloques de piedra que configuraban los cimientos de aquel templo y de aquella escalera, un sonido similar a una tromba, como si un cuerno fuera soplado en tiempos de guerra para dar aviso de una amenaza latente, como si fueran las trompetas del apocalipsis, similar a la bocina de un enorme buque o la de un barco antes de zarpar de algun muelle o puerto, en un minuto ese conmovedor sonido crei que podria ser producto de las rafagas de aire dentro de las cavernas, pero...

-D..d-debemos apresurar el paso... *le comentaba agitado intentando sostener fuertemente su femenina mano*

Lo ayudó a levantarse, pero no dejaba de escucharlo porque lo que le contaba ya había leido sobre eso, había tanta literatura sobre el asunto que era imposible saber si era verdad o no, pero lo vampiros reconocían su condición del mito de Caín y Abel, por eso no sabía que era lo que el licano quería comprobar, probar con lo que tanto buscaba... Y era un espirista... el licano seguramente vio todas las veces en que ella usó fantasma para enviar mensajes. Levantó los hombros, y apuró el paso, quedarían atrapados en aquel lugar si no salían pronto.

-una cura...- susurró, las paredes de aquel lugar se movían y temblaban soltando algo de tierra - hablas como los que vendían las cura para todos los males, John- exclama, demostrando lo estiptica que estaba respecto a las palabras porqué simplemente no podía creerle, había leido quizás más que él sobre vampiros, sobre los antidivianos que habían sido casi extinguidos en la era del anarquismo de hace 200 años.

Temperance se puso debajo del brazo del vampiro y lo comenzó a jalar lejos de aqul lugar, recorriendo el largo pasillo que cada vez estaba más oscuro, -necesito que me indique por donde ir- le dice, después de todo, ella iba a ciegas, al no poder ver en la oscuridad, su pecho se aceleraba, el poder que ahí estaba era tan latente que la mareaba - quiero salir de aquí para seguir conversando de todo lo que habla, de todas formas, creo que sólo son cuentos, no hay tales curas... muchos las han buscado y nadie la he encontrado...-

Pero si existía la prisión de los espiritistas, si existía aquel lugar en donde los que habían sido atrapados por los humanos cuando pasó lo del carnaval de los cerezos, Temperance cargaba con esa carga, porque ella había desatado todo aquello.

-pero lo que los militares hicieron... o mejor dicho, hacen con los espiritistas, es verdad.. lo sé porque el arma que usaron, fui yo, sólo... que no se lo esperaban y luego, se desató todo lo de Octubre, los humanos no pudieron hacer mucho, los demonios destruyeron los gobiernos centrales y no hubo nada que hacer, el pentágono del que habla... ahora es solo unas celdas en la zona humana, en donde tengo mi habitación reservada, por eso tenia tanto miedo de estar en aquel lugar, porque si me ven, sería atrapada- mojó sus labios -ellos no saben que desperté de mi coma... de lo contrario, jamás me hubieran entregado a los vampiros de los brotherhood- mordió su labio inferior, aquella era su misión para poder proteger a los que eran como ella.

El Licano apenas sostenia las rodillas por tal impacto y ya podia olfatear el azufre en el ambiente, lo que realmente no le agradaba del todo, cada palabra sobre los vampiros realmente le hinchaba las pelotas y sus declaraciones no hacian mas que incentivar ese malestar, de manera brusca detuvo el andar junto a la muchacha.

-Por aqui...


Habia una plataforma con luces de tubos fluorescentes que parpadeban de vez en cuando y en el fondo antiguas y derroidas escaleras mecanicas con emergencias de salida, una estacion con antiguos baños publicos y banquillso entre pilares trizados, hojas de periodicos revoloteando por el lugar y algunas desteñidas gigantografias publicitarias en las paredes realmente dejaban expuesto un paisaje desolado, pero que dejaba una salida hacia la superficie.

Una tenue y calida luz parecia penetrar a medida que estabamos subiendo esas escalas mecanicas, estabamos llegando a una bahia cercana a Staten Island.

-Mujer, hablas subestimandome, deberia haberte cortado la cabeza con esos militares...

Sonreia de medio lado, con los dientes enrojecidos por los escupo de sangre que lanzaba de mi boca de vez en cuando, aun se respiraba la bruma pesada del lugar aunque el dejo de azufre desaparecia paulatinamente.

-Esas esculturas gigantescas estan siendo vigiladas por demonios... haaa... espectros de mierda... unghhh... acaso crees que esos cornudos pierden su tiempo rodeando estatuas pobres y sin vida??...

Algo tambaleante buscaba sentarme sobre un banquillo de piedra en una plazoleta bastante grisacea y de arboles sin vida, repleta de grietas y polvillo similar a la ceniza bañando todo el paisaje.

-A Cristobal Colon lo tildaron de demente cuando dijo que la tierra era redonda. Yo digo que tu escepticismo esta pasado de moda viendo todo lo que pasa a tu alrededor mhhhmmmmhhhmmm....

Hubo un minuto en que la mirada la perdia de manera desorbitada y tenebrosa en cada quejumbroso comentario contemplando el paisaje y el rostro de desconcierto de la muchacha a mi alrededor. Exhalando pesado y entrecortado.

-Fuiste capaz de abrir un portar al infierno para que Guerra y su caballito entrara a NY y no puedes controlar el poder de los Ancestros de Piedra, que penita por los imbeciles que murieron en ese entonces... *escupe* hay una conexion con el mundo antediluviano con esas estatuas y tu lo que haces es acobardarte saliendo de alli... quizas deberia buscar a otro espiritista interesado en conectarse con el Registro Acasico de estos monolitos... Al menos si hubieras aceptado... haaa... dejarias de andar pululando entre los fiambres Cainitas y de la Hemandad de una jodida vez, y harias algo realmente por los tuyos...mhhhmmmmhhhhmhhh

seguramente aquellos focos eran alimentados por energía alterna, hasta solar que permitía que aun estuvieran funcionando a pesar de que ya llevaban meses sin mantenimiento, pero lo que era evidente era que el olor a humedad penetrante de aquellas paredes demostraba que aquella luz sólo seria por algún tiempo más, si no recibía mantención, pero¿quien lo haría? la humanidad había sido llevada al borde de su extensión y con eso también a los vampiros, parecía que la única raza que tenía aun algunas esperanzas eran los licanos, pero si eran como el que tenía delante de ella, no veía mucho destino en ellos, más allá de su propia destrucción o renunciar al fin y arrojarse al descontrol del Grimm, como ellos lo llamaban. Cerró los ojos un instante, y colocó su mano en su boca, para así evitar que aquel hedor siguiera produciendole escozor en la nariz.

Observó con detención al licano, de reojo, mirando sus gestos, esa indulgencia al hablar,aquella indolencia casi demente con la que parecía enfrentar los hechos, pero ¿quien no lo sería si tenía dentro de sí la energía de un demonio? Temperance podía verlo, aquella ahora perturbada, oscura, lo que le asombraba que aún pudiera pensar y hablar por sí mismo, signo de un espíritu fuerte, porque de ser otro, ya hubiera sucumbido a la locura absoluta de sentir aquellas voces y el martirio eterno de un alma doliente.

Pero el Licano parecía hablar con mayor conocimiento de causa de lo que ella imaginaba, no era de extrañar de todas formas, si era verdad, claro, que el licano había trabajado con los federales de USA, y que su existencia se remontara hace por lo menos docientos años. No por nada tenía información de ella, pero no completa, el licano no sabia que aún la buscaban y más aún, que en realidad los humanos la daban por muerta, o mejor dicho, fuera de circulación, porque aún la hacían sumida en un coma del cual, no debería jamás despertar. Hasta ese momento, ella aún no estaba en los radares humanos.

Frunció los labios, y mantuvo la distancia del licano, cruzada de brazos, el olor de su sangre era intenso, el olor a metal parecía ser más marcado en la sangre del licano que comenzaba a coagular sobre sus heridas y la piel del hombre. Hubo un suspiro ahogado, una sensación de que debería tomar aquel camino, en un verdadero atisbo de cordura, pero esa cordura chocaba con violencia con la idea de aliarse con un ser tan contaminado como el que tenía delante de sí. Recordó su libro, la investigación de su madre, y toda aquella información que como heredera principal de los Brunswick tenía. El licano no estaba para nada perdido.

-debiste...- responde al final con una voz más marcada, más fuerte --... si, debiste, pero por alguna razón me has buscado a mí, aunque no sé si he sido tu primera opción- se acercó al licano y se arrodilló delante de él -lo que buscas, es y será un sueño, no puede salir de ahí- le advirtió, sus ojos fijos en el licano, como si con aquella mirara dejara gravado en la mente del licano aquella aseveración.

-... por muchos siglos de vida que tengas, juegas con fuerzas más allá de tu propia compresión, porque si así fuera, no estarías tan contaminado como hasta ahora estas - cerró los ojos, y sujetó la mano del licano con fuerzas, esas garras que podrían acabar con su cuerpo.

-y yo no estoy con vampiros, o con humanos, que rápido juzgas... de todas formas, - tocó la palma del licano -no te culpo, muchos lo han hecho conmigo, y vamos, ve a buscar a alguna espiritista, hay algunas que se han escapado de la prisión o de la muerte, lástima que la que podría servirte, está bajo gran protección - se pone de pie, y se abraza así misma -los velos están tan delgados, que el más mínimo movimiento puede rasgarlo, lo que buscas, lo que investigas, puede llevarte a abrir una puerta que no puedas controlar, y eso no te hará muy distinto a los cainitas, a los fiambres como los llamas, que no supieron como controlar los portales, y mira lo que han hecho, ah, por cierto, yo no abrí el portal, este se abrió sólo, ten presente eso - se fue alejando de él, poniendo su mano sobre la pared.

-estamos cerca de la estación de metro,- habla en un susurro, y sigue caminando para salir de aquel sitio.

La figura del lobo se ocultaba a contraluz cuando la chica tomaba dos pasos de distancia tras el, dibujandose una leve sonrisa demente e infame y los ojos se le tornaron de un color dorado intenso cuando notaba como se iba alejando mientras exploraba aquella derroida estacion de NY

-No puedo entender como una persona tan debil de pensamiento puede andar por alli cazando demonios como si fueran mariposas coleccionables en un pequeño terrario, pensando que con ello podra cambiar el mundo...

El Macho Alfa caido evocaba una sutil y ligera carcajada que resoplo en el ambiente en un repetitivo y angustioso eco que parecia provenir de diferentes angulos y fuentes en aquel lugar tan lugubre y pesado, cuando ya la chica parecia encaminarse a las escaleras.

-Le tienes miedo a esas fuerzas fuera de nuestra comprension de las que me estas preeviniendo?? que tonta eres mujer... no quiero imaginarme el resto de espiritistas que deben de ser igual de inutiles...

Las suelas de los botines que llevaba puestos resonaban entre los charcos improvisados de sangre sin dejar de clavarle la mirada a la mujer, aquella mirada de bestia indomable y amenazante, cuya presencia a cada paso avanzaba en un mar de susurros y lamentos angustiantes que provenian directamente del aura propia, todas las presencias oscuras y esa energia converge ahora desde mi, como si realmente se reflejara la verdadera naturaleza intrinseca y oscura que parecia oculta hasta aquella negativa.

-Todos los mundos astrales, desde el mas bajo hasta el mas alto reciben flucutaciones de este universo y estos portales abiertos, un desequilibrio grosero producto de que cada plano parece adelgazarse sin control, algun hecho que pudo tener antecedentes del pasado pudo ser el causante de que cada velo se adelgace, o pudo ser alguien... y tu miedo irracional a las fuerzas desconocidas de la existencia te hacen alejarte de estas estatuas, una pista valiosa, y tu te alejas como un bebe asustado...


Mi cuerpo se volteo ligeramente oculto en esas penumbras apuntando hacia aquella direccion con total desafio y provocacion, con las tinieblas irradiandome las espaldas con esos lamentos sutiles que se podian percibir en el ambiente.

-Alli esta el motivo para que dejes de gastar tu poder en inutiles cazas de brujas, unirte a una causa mas noble para salvar a este mundo y el universo, unificar a tu pueblo espiritista, unificarlos a todos por el bien de este mundo, y encontrar esa matriz gracias a estos monolitos siendo el noble estandarte de la verdad... y tu lo que haces es correr como alma en pena mhhhmmmhhhmmmmmhhh... El legado de tu mami debio ser bastante pobre e inutil por lo visto, siempre necesitas a alguien que te pique para hacer algo bien y descente, ya que por tu cuenta eres un intento bastante patetico de cazadora...jmjmjm... si ese es el perfil de una de las mas fuertes espiritistas, entonces el resto debe ser unos pobres diablos que merecen ser esclavizados y abusados hasta la extincion...

Ya era cansino el licano, que como la serpiente del edén acosaba sus oídos, ahora usando una cantaleta acusando que no era lo suficientemente fuerte, que no tenía el poder para controlar aquel poder. Bufó y lo miró de reojo, en todo momento, aún deseaba salir de ese lugar, pero ese licano era un verdadero dolor de cabeza. Rodó los ojos, y colocó sus manos en su cintura.

-bravo...- levantó sus manos y le aplaudió, dos o tres veces -debiste ser político cuando aún existía una república- llenó sus pulmones de aire y lo siguió mirando ahora caminando hacia él -aunque hablas igual que un vampiro, el mismo discurso... lo mismo... Russell Endington decía lo mismo, Delancre decía lo mismo.. el mismo discurso, si no olieras como un licano, pensaría que eres un vampirito, deseoso de desatar el infierno azul y que así comience la navidad para ellos - apretó los labios y luego sonrió.

- ¿una causa más noble?.. pff ¿por quién me tomas?... por una pobre vanidosa que con aquellas palabras acusándome de débil me convenceras?, mal, muy mal, me subestimas, estoy tan consciente de donde vengo y quien soy, que aquellas palabras ni me molestan, me las han dicho tantas veces que poco me importan ahora - se encoge de hombros con un gesto de absoluto desdén por las palabras del licano.

-además, si me sumara a esa campaña, no sería contigo, no hay que ser muy listo para saber que tus intensiones no son tan nobles como lo expresan tus palabras, algo me dice que estás tan acostumbrado a tu condición, que.. vamos, ya ni siquiera te molesta, que seguramente ni siquiera buscas una forma de acabarla... oh poder y vanidad, lo que me dices a mí, en realidad es una proyección de lo que piensas tú mismo de ti, ¿o no?, en fin.... sólo te diré que investigaré, pero lejos de ti, de todas formas gracias por esta información- levantó su mentón de una manera desafiante, porque el licano había tocado un punto realmente crucial y seguramente lo único cuerdo que había dicho. Había que investigar, encontrar respuestas y terminar todo aquello que había comenzado por la ambición desmedida de unos cuantos.

-¿ vas a seguir ladrando o ya acabamos esta conversación?- sus ojos estaban enfocados en los monolitos, debía analizar más aquellas figuras, pero con precaución, -bien, no tienes nada que decir- levantó su mano y cortó con ese gesto cualquier palabra del licano, y se devolvió hacia donde estaban los monolitos, alumbrandse con la linterna los símbolos, y con la otra tocando las inscripciones, no susurraba lo que estaba leyendo, si es que podía leerlos. Se había despertado el bichito de la investigación, pero era evidente que no confiaba ni un ápice en el licano como para compartir lo que pudiera averiguar en ese lugar.