Mockingjay Song {Afiliación Normal}

Afiliados Normales # Historia Completa

Desde hace 20 años, Panem está sometido al yugo del Presidente Midway. Panem permanece silenciosa, a exceptuar de los rebeldes sinsajos. Pero algo sacudió a Panem. En los decimo novenos Juegos del Hambre, se produjo algo inesperado e insólito: Ningún tributo se alzó ganador.

-Día 37 de los 19os Juegos del Hambre de Panem. 3 Tributos Vivos-

-¡Estamos en el día 37 de los Juegos del Hambre! -la voz de Macee, la presentadora de los Juegos del Hambre desde hacía tres años, resonó en las casas y las plazas de todo Panem.- Panem está deseosa de saber quién ganará, ¡y sólo quedan tres tributos! Recordemos sus nombres y sus distritos.

Las imágenes de cada tributo empezaron a pasar, a la vez que Macee los presentaba. La primera en aparecer fue una chica pelirroja, de aspecto fuerte y preparado, de brazos que no tenían que envidiar a los del mejor leñador del Distrito 4. Sus ojos azul cielo escudriñaban el suelo desde lo alto de las copas de un árbol.

-La primera tributo es Omaha, del Distrito 2. Una chica con carácter, una de mis preferidas. Lleva, si no mal recuerdo, unos cinco asesinatos en los Juegos, y sólo uno ocurrió en la Cornucopia.

Las imágenes cambiaron y se mostró a un chico de tez morena y ojos oscuros, también tan fuerte como la chica, y mucho más alto que ella. Seguramente tendría unos dieciséis años, rozando la mayoría de edad. Una mala suerte.

-El segundo tributo es Lench, del Distrito 8. Un chico fuerte, sin duda, aunque no sé de donde habrá salido. ¡En el Distrito 8 no he visto nunca nadie así!

Y la imagen volvió a cambiar, esta vez mostrando a un niño de unos doce o trece años, que parecía estar dentro de una cueva. Tenía una espada a su lado que podía ser perfectamente más grande que él y pesar el doble.

-El tercero y último de los tributos es Zeth, del Distrito 12. Otro que sorprendió a los habitantes de Panem, sin duda alguna. Su estrategia no es la mejor, pero... ¡ahí está, no ha muerto! -parecía sin duda sorprendida pero su voz llevaba un toque de admiración.- ¡Les mantendremos informados de todo lo que pase!

Las horas pasaron, y unas cuatro horas después, el sonido del cañón silbó en el aire. Omaha había asesinado contra todo pronóstico a Lench, aprovechando su posición ventajosa y su arco. Sólo quedaba que Omaha encontrara a Zeth, y todo habría terminado.

Eso ocurrió un par de días después, el 19 de Noviembre. Los sinsajos cantaban en cada rincón del Distrito 13. Y anunciaron lo inevitable: Omaha encontró a Zeth y le dio muerte tan fácil como si hubiera roto un lápiz. Pero al ver el cuerpo del niño, que era bastante pequeño para su edad y con apariencia infantil, sintió un tremendo remordimiento. Todos sus asesinatos anteriores habían sido a chicos y chicas de su misma edad o mayores que ella, y si no, no mucho menores. Pero aquel crío tenía doce años, y antes de que pudieran anunciarla como ganadora, cogió la espada de Zeth y se la clavó en el pecho.


Las cosas en Panem desde entonces habían cambiado. No habían hecho una gira de la victoria -¿con qué tributo iban a hacerla?- y el pueblo parecía tremendamente indignado. No sólo se habían llevado a dos niños de cada distrito, si no que habían asesinado a todos y cada uno de ellos. No quedaba confianza alguna en el Capitolio, y eso se notaba cada vez más.

Mientras tanto, los vigésimos Juegos del Hambre están por llegar, y el Distrito 13 ya no es el único que escucha a los sinsajos cantar: ahora los sinsajos cantan por todo Panem. Pero parecen haberse establecido en el Capitolio. Y eso no es buena señal para el Presidente Midway.

Se han creado pequeñas resistencias en los Distritos -siempre formadas por adultos que ya no son tributables- para poder ayudarse y evitar que los tributos tengan que añadir su nombre más veces para poder recibir cereales para su familia. Pero eso no evitará que veintiseis chicos tengan que ir a una tierra donde a veinticinco, o quizás a los veintiseis, les espere la muerte. Porque un cambio no se hace en un año.

¿Te atreverás a enfrentarte al Capitolio o serás el propio Capitolio?