~The future in my hands~ [Privado]

Me encontraba en la agencia como de costumbre, revisando papeles y demás cosas, algo que realmente no debería estar haciendo pero que a falta de personal y la cantidad impresionante de papeleo, había terminado haciendo, aunque no podía quejarme el dueño siempre me trataba de lo mejor, conseguía buenos trabajos y el tiempo no estaba perdido ya que me pagaba por organizar aquellos papeles. Así siguió todo durante un largo rato hasta que un chico de negros cabellos entro para darme un bonche de papeles que debería revisar además de los que ya tenía sobre el escritorio eso solo hizo que me enojara mas de lo que ya estaba por no haber siquiera salido a comer ese día gracias al trabajo. Trate de mantenerme con calma pero por mas que lo intentaba no lo lograba, estaba realmente irritada y si no salía aunque sea por un momento terminaría explotando.
–Me largo de aquí- Exclame levantándome del escritorio en el que me encontraba haciendo que aquel chico dejara lo que estaba haciendo para verme esperando la razón de tan repentino grito, yo simplemente deje lo que estaba haciendo y comencé a caminar a paso decidido con los brazos a mis costados y los puños cerrados, hacia la puerta del despacho para por fin salir de mi encierro pero no contaba con que aquel chico que momentos antes había entrado, se interpondría en mi camino evitando que llegara hasta la anhelada puerta .

–Señorita debe terminar su trabajo antes de que pueda salir o será peor después y se le terminara juntando mas- Dijo el hombre para evitar que me fuera pero sus palabras no iban a hacer que me se quedara y el lo sabia, cuando a ella se me metía algo a la cabeza no descansaba hasta lograrlo, así que simplemente pose la mirada en mi acompañante haciendo que este se volteara inmediatamente y comenzara a caminar hacia la puerta de la oficina del jefe con algo de inquietud, pocos segundos después el jefe salió con su característica sonrisa en los labios. –Deja que se vaya, lleva mucho tiempo aquí ya es hora de que tome un descanso- Dijo mirándome. –Gracias Derek, te debo una- Fue lo ultimo que dije antes de dirigirme a paso rápido hacia la salida.

En cuestión de minutos ya me encontraba fuera de la agencia aunque realmente no tenía pensado ir a ningún lugar en especial, solo quería despejar la mente un rato.

Me dedique a caminar por las calles de Brooklyn Heights durante un largo rato hasta que terminó llegando a mi adorado Bar. –Umm… Pasare a ver como van las cosas- Dije en voz baja sin dejar de caminar, al llegar abrí la puerta con poca delicadeza algo que hizo que atrajera una que otra mirada y me quede mirando el interior del ya tan conocido Bar. –Esto esta mas animado de lo normal…debe ser por las bandas que se presentan- Murmure al tiempo que una sonrisilla se dibujaba en mis labios, ese era el día en el que permitíamos a toda clase de bandas presentarse algunas un poco conocidas y otras no tanto. No tarde mucho en caminar hacia el lugar donde se encontraba la barra hasta que me tope con uno de los trabajadores. -Leyla…tenemos un problema la banda que iba a tocar no se ha presentado y la que sigue aun no llega…no creo que tarden mucho pero la gente comienza a enojarse- Dijo con suma preocupación. –No te preocupes cantare yo, que tiene mucho que no lo hago- Le di una palmada en el hombro y me encamine hacia la tarima, unos cuantos amigos con los que antes había compartido escenario y que trabajaban ahí al ver lo que pretendía hacer me acompañaron y subieron conmigo, no dije nada solo les dedique una sonrisa para después tomar el micrófono, ellos ya sabían que canción debian tocar pues era con la que solia abrir siempre, el publico se veía algo molesto pero no le tome importancia y solo me limite a escuchar las primeras notas de la guitarra, cerré los ojos por un momento dejándome llevar hasta que por fin llego mi entrada.


Seguí cantando, sintiendome cada vez mas libre y relajada como en los viejos tiempos, la gente parecia estarse alegrando un poco mas aunque en ese momento poco me importaba.

El tiempo transcurrió rápidamente mientras me encontraba arriba, la música cesó lentamente dando fin a ese corto pero agradable concierto o por lo menos para mi y mis músicos acompañantes, aunque la gente parecía mucho mas tranquila que antes y yo estaba de lo mas feliz pues nada se comparaba con aquella sensación al estar arriba del escenario, con los reflectores y escuchar los aplausos pero lamentablemente mi tiempo había acabado pues la banda siguiente ya estaba lista para tocar así que baje del escenario y me fui a sentar a la mesa donde estaban aquellos con los que momentos antes había compartido el escenario en espera de la próxima banda.

Canción:

Me quede ahí sentada cruzando una que otra palabra con mis acompañantes, riendo de vez en cuando por los cometarios de ellos hasta que por fin la banda que seguía termino de conectar los instrumentos y ya estaban listos para tocar, no les había prestado mucha atención hasta ese momento en el que la distorsión del sonido proveniente de la guitarra comenzó a inundar el lugar, era una manera algo extraña de comenzar por lo que mi mirada se posó casi inmediatamente en el guitarrista el cual para mi sorpresa lucía bastante familiar, ¿Acaso mi mente me estaba jugando una cruel broma?. Me quede mirándolo con una evidente confusión y sorpresa en el rostro pues de verdad no podía creer que de todos los lugares en el mundo el había venido a parar precisamente a mi bar aquella noche. – Ley ¿Te encuentras bien?-Dijo el chico que se encontraba justo a un lado de mi pero yo no le preste mucha atención ya que seguía perdida entre la música y la confusión, lo único que hice fue ponerle una mano en la boca para indicarle que guardara silencio cosa que hizo al igual que los otros tres aunque realmente no entendían a que se debía mi enajenación, poco a poco me fui relajando, dejándome llevar por las notas que llegaban a mis oídos acompañadas de una que otra mirada de aquel chico que durante tantos años había extrañado.

La melodía termino e hizo que por fin lograra volver a la realidad, alejar todos aquellos recuerdos que habían inundado mi mente durante esos minutos, ahora mi concentración estaba en lo que pasaría pues el me había reconocido eso era algo mas que obvio aunque no sabía cual iba a ser su reacción después de tantos años y mucho menos la mía aunque eso no era novedad ya que siempre me guiaba por mis impulsos y jamás reaccionaba como creía, mi mirada se posó en el, mis nervios se alteraron un poco al ver como aquel castaño bajaba del escenario y comenzaba a caminar en dirección a mi mesa, mis acompañantes se miraban entre sí sin entender muy bien lo que pasaba pero ese intercambio de miradas no tardo mucho ya que estas se dirigieron a Marshall el cual ya se encontraba lo suficientemente cerca como para escuchar mi voz así que solté lo primero que se me vino a la cabeza.

-Pero mira lo que trajo el viento – Dije con un tono algo seco y una expresión de seriedad en el rostro pero esta no tardo en volverse una de felicidad. –Ha pasado tanto tiempo….-Me levante al terminar de decir eso para después caminar lentamente hacia el contoneando las caderas de un lado a otro, mirándole de arriba abajo, al estar frente a el sin ninguna silla o persona que estorbase me quede mirándole fijamente con las cejas enarcadas, las manos en la cintura y una expresión de ligera molestia. –Pero dime ¿En donde diablos te habías metido?...¿Debajo de una piedra acaso?- Me quede en la misma posición unos momentos hasta que el sonido de una guitarra hizo que mi atención se fijara en el escenario nuevamente, al parecer la siguiente banda ya estaba lista para tocar y lo mejor sería que fuéramos a otro sitio un poco mas tranquilo o no podríamos escuchar ni nuestros propios pensamientos cuando la banda empezara a tocar.

Era lógico que me había reconocido. Su expresión durante el show lo hacía evidente, cosa que me tranquilizaba bastante. Eché un leve vistazo a sus amigos en caso de que haya entre ellos algún otro camarada perdido pero ninguno se me hizo familiar. Volví la vista hacia ella cuando me hablaba con esa seria tonalidad que me causó mucha gracia, aunque no lo evidencié externamente. Me limité a observarla sonriente alzando una ceja. Mientras caminaba, colgué la funda y la guitarra por separado a mi espalda, con el mástil apuntando al suelo y me troné los dedos.

No respondí de ninguna manera a sus dos primeros comentarios. Pensaba en toda la avalancha de preguntas que podría plantearle mientras la observaba acercarse a mí de esa manera que a cualquier hombre le haría babear. Yo no era el ser más depravado existente sobre la tierra, por lo que no me costó mantener la mirada sobre su cuello. Me detuve a un par de metros de ella cruzando los brazos ante mí, casi remedando su actitud de molestia. - Atravecé desiertos, vencí obstáculos, sobreviví a mil infiernos, crucé agueros de gusano y desafié la barrera espacio-tiempo para encontrarte y ¿así es como me recibes? - dije exagerando dramáticamente y bromeando justo antes de oír el sonido proveniente de los amplis en el escenario.

Le hice un gesto con la cabeza indicándole la salida. -Voto por tomarnos algo en un lugar menos ruidoso, yo invito - le dije antes de comenzar a caminar hacia la puerta despreocupadamente riéndome por lo bajo. Conocía muchos lugares en los alrededores donde podíamos ir a conversar con mayor tranquilidad, pero en sí no me parecía muy relevante la locación. Se me hacía más interesante saber las cosas que haya hecho durante todo este tiempo.

Al principio mantuve esa expresión de molestia que momentos antes había mostrado pero por todo lo que decía no pude evitar esbozar una enorme sonrisa de oreja a oreja, realmente extrañaba escuchar aquella voz y sus comentarios fuera de lo común así que no desperdiciaría la noche discutiendo con el sobre su repentina desaparición, ya tendría tiempo de sobra para cuestionarle mas adelante sobre ese y otros temas.

-Estoy totalmente de acuerdo contigo, este no es un buen lugar para hablar…-Realmente no era algo muy bueno que yo hablara así de mi club pero eso solo se debía al tipo de evento que estábamos llevando a cabo en el pues normalmente se trataba de un lugar mas tranquilo o un poco menos ruidoso. –O por lo menos no esta noche- Dije comenzando a caminar justo detrás de el en dirección a la puerta sin preocuparme por el club pues sabía que estaba en buenas manos, no por nada toda esa gente llevaba tanto tiempo trabajando conmigo, voltee una ultima vez antes de perderme entre la gente para dedicarles una sonrisa a los chicos con los que antes estaba y mover la mano en señal de despedida, ellos se quedaron de lo mas perplejos ya que no solía recibir muchas visitas en el club y muchos menos terminar yéndome con estas .

No tardamos en llegar hasta la puerta y salir a las transitadas calles aun para la hora que era, seguí caminando siendo guiada por el castaño mientras el viento revolvia mi rojiza cabellera. –¿A donde planeas llevarme Marshall?, y además, ¿Tus amigos no se preguntaran a donde fuiste sin decirles nada? - Realmente no era como si el lugar me importase mucho pero tenía un poco de curiosidad por el lugar que elegiría mi compañero aunque conociéndole sería uno de mi agrado así que no debía preocuparme.