Velkan F. Karvlaska

8 de Agosto de hace 22 años daba comienzo a todo en una familia de licántropos. El nacimiento del castaño, alegró a toda su familia, pero él no era consciente de el futuro que le esperaba. ¿Quien le iba a decir que le había tocado un padre drogadicto y maltratador? Una faceta que nunca antes habían conocido por parte del señor Karvlaska, nadie de la familia, ni incluso su esposa misma conocía ésa faceta. Bueno... volvamos a Velkan. Velkan. Así lo llamaron, Velkan Fane, el segundo nombre se lo pusieron en honor al padre difunto de su madre, o sea... su abuelo materno, y ella no se quedaría tranquila sin que él no se llamara como su padre. Dos años después, nació su hermana pequeña Lina y su hermano Aris.

5 Años. Todo empezó a salir a flote. La faceta de su padre empezó a salir a flote. Cada noche venía drogado, bebido o dios sabía qué. Todo empezó una noche fría, lluviosa, más bien tormentosa. El padre salía de trabajar y unos compañeros lo llevaron a tomar unas copas. Él se pasó y llegó a casa, como ya había dicho, borracho. Todos estaban durmiendo, o mejor dicho, Velkan no: aun seguía despierto, quería ver a su padre, quería que le contara un cuento para que se durmiera; vamos, lo típico de un niño de 5 años. Cuando escuchó la puerta, salió disparado de la cama y bajó corriendo las escaleras tirándose sobre su padre diciéndole que le contara un cuento, pero el hombre mayor, le pegó una bofetada tirándolo al suelo gritándole. Los gritos, despertó a la madre de los niños y bajó a ver qué pasaba, viendo como el castaño estaba llorando. El padre miró a su esposa y la empujó llamándola de zorra a algo más fuerte, le dijo de todo menos bonita recibiendo golpes, magulladuras y todo lo que fuera posible, hasta que el padre se fue a dormir. Velkan se quedó con su madre durmiendo en el sofá.

6 años. Los maltratos iban de mal en peor a cada día que pasaba. Cada día iba yendo a más, hasta que le tocó a la pequeña Lina, por suerte, Velkan la protegió recibiendo él los golpes de su padre haciéndose el fuerte sin rechistar, aunque algún grito de dolor y las lágrimas salían de sus ojos. Un niño de 6 años, no es de piedra, pero quería hacerse el fuerte, quería demostrar que podía proteger a alguien a tan temprana edad, y así lo hizo. Protegió a su hermana pese a la corta edad de ésta y la corta edad de él mismo. Unos dos dias después, el padre cogió un cuchillo y asesinó a su esposa sin tener control de su cuerpo sin darse cuenta de que el castaño estaba mirando, bueno, los tres castaños: los tres niños estaban mirando ésa escena. Velkan tapó los ojos de su hermana para que no lo viera cerrándolos él también, junto con su hermano. No tenían lugar dónde ir, aunque se tuvieron que quedar pese a lo que el futuro les esperaba.

7 años. El chico ya empezaba a coger rasgos algo más masculinos, pese a lo niño que era aun. Digamos que era un chico espabilado, aunque aun era un niño y tenía cara de niño; sólo que era algo más alto que los niños de su misma edad. De momento, en ése año todo fue bien, todo estuvo en paz, aunque el chico se mostraba distante con su padre, frío. El padre ingresó a un centro de rehabilitación. Lo consiguieron rehabilitar, pero tanto Velkan ni Lina ni Aris se fiaban ya de él. Siempre iban con cuidado con él, con lo que siempre hacía, no se fiaban ni un pelo ya.

12 años. Estuvieron durante 4 años de relax, que podrían volver a confiar en su padre. Medio confiaban en él, pero también desconfiaban. Velkan ya era un adolescente, bueno, casi casi, y a los 12 años ya empezaba a coger forma y empezar a ser un hombre atractivo. Una noche, había invitado a una amiga suya en casa, pero no se quedó a dormir. Velkan se sentía muy atraído por ella, pero nunca tuvo narices a decírselo, fue la unica que hizo que el muchacho creyera en el amor. Ésa misma noche, cuando él estaba en la cama pensando en ella, empezó a hacer algo que un niño de 12 años no haría, pero quería probar, quería experimentar, quería... masturbarse, y así lo hizo. Hasta que su padre entró en la habitación sin picar a la puerta pillándolo. El muchacho se tapó gritándole, cortándole el rollo. Allí empezó, cuando el padre empezó a no respetar la intimidad del muchacho. A las semana siguiente, la chica se quedó a dormir, del cual se desvirgaron mútuamente, aunque, cuando ya estaban acabando, su padre interrumpió. Velkan le volvió a gritar empezándolo a insultar.

15 años: Fueron 3 largos años de gritos, peleas y discusiones entre padre e hijo, aunque él ya pasaba de todo. La única que respetaba su intimidad fue Lina. Allí fue, cuando decidió irse de casa.

17 años. Ahí empezó todo, pese a que no quería, tenía que ir con su padre. Ahí empezaron las abusiones sexuales por parte de su padre; tanto en él como en Lina. Primero empezó con la pequeña Lina que ya empezaba a coger forma y se parecía bastante a su madre. Todo empezó con ella. El padre la intentó violar en innumerables ocasiones, del cual Velkan estaba allí para protegerla. Una noche, el padre había salido con los amigos y volvió a caer en la bebida, del cual llegó a casa borracho otra vez. Velkan estaba dormido en su cama con unos boxers, del cual no se daba cuenta de que su padre estaba allí. Empezó a acariciar a su hijo, más concretamente, las piernas, con dulzura, ternura, con otras intenciones. El padre le quita los boxers a su hijo, del cual él se despierta cuando el padre estaba apunto de comerse el pene de su propio hijo. Velkan lo empujó de la cama gritándole otra vez, dándose cuenta del aliento, del olor tan característico a alcohol que provenía de los labios de su padre. En ése momento, se hartó e hizo las maletas llevándose a su hermana de allí, llevándola a casa de su mejor amigo, del cual se quedó a vivir unos días.

A los 18 años, la casa donde estuvo viviendo todos estos años, se había incendiado y su padre había muerto en aquél incendio. Los tres hermanos no se inmutaron y Velkan siguió adelante como buen líder era. Noches después, en noche de luna llena, se descontroló como cada mes, y allí mordió a una muchacha convirtiéndola. Unos pocos dias después, se encontró con aquella muchacha, decidiendo ser su tutor para saber controlarse. Allí sintió algo muy fuerte hacia ella y nunca se declaró, hasta que se veía obligado a dejarla ir, cuando ella se declaró. En ésa noticia, el muchacho se quedó boquiabierto, pero la besó, sólo la besó, diciéndole que no se iría, que la amaba y que era la única persona que le importaba.

Ahora, a los 22 años, está en Nueva York trabajando como dependiente en una tienda de deporte con la misma chica que convirtió hace 4 años atrás, aunque también está en la manada de Fianna, ya que era la única manada que podría entrar