Encuentro con el Pasado

Tenía muchas cosas en las que pensar sinceramente, pero con tantas en mi mente sabía que era el momento oportuno para hacer algo diferente y distraerme. Caminaba por las frías calles de la ciudad, la gente pasaba lucia en parte tan normal y tranquila a pesar de todo lo sucedido que en ocasiones llegue a envidiar su situación. Mi vida era mucho más complicada y con muchas más cosas que pensar en ese mismo momento, había estado investigando lo sucedido en el Winter Festival pero para ser honesta muchas de las cosas que había encontrado carecían de sentido.

Entonces mire que a pesar de todo lo sucedido y el toque de queda muchos teatros había decidió seguir atendiendo y continuar con sus presentaciones habituales. Eso era lo que decía el periódico que como era costumbre siempre compraba y leía para mantenerme por lo menos algo informado del asunto, de lo que sucedía en la ciudad. Me llamo la atención que presentara Hamlet, hace tanto que ya no la presentaban en los teatros pero volver a verla traería recuerdos. Me encamine al teatro y entre en el mismo situándome en las primeras filas, donde podría disfrutar mejor de la obra, hace apenas unos segundo que había logrado sentarme y estaba acomodándome para la noche, cuando sin previo aviso lo escuche.

Araphiel Moon Dead escribió: -"Muchas veces tenemos por amor lo que es verdadera desgracia."-

No pude evitar dar un pequeño brinco y luego mirar hacia atrás, ahí estaba después de tanto tiempo, igual que la ultima vez que nos habíamos visto. Verlo me llevo a recordar tiempos hermoso, en los que compartimos tantas cosas, pero el mismo destino que ahora nos volvía a reunir era el que nos había separado hace tanto tiempo. Sonreí ampliamente y no puede evitar abrazarlo de improvisto, la emoción me embargaba, pues hace mucho tiempo que no sabía de él y siempre era grato encontrarse con un amigo.

- Araphiel, eres tú? … no has cambiado nada, estas igual que la última vez –mencione algo eufórica, lo invite entonces a sentarse junto a mí por un momento por los menos mientras la persona que se situase junto a mi viniese para poder platicar un rato, era para mí de sumo interés saber que había sido de él, donde había estado todo este tiempo- Donde has estado? … cuéntame –termine de preguntar, la verdad me causaba mucha alegría ver nuevamente a mi viejo amigo, hace mucho que no nos veíamos.

Lo escuche con tanta atención que me sorprendió haber escuchado tanto de él, estaba aquí nuevamente, después de pasar tantas dificultades, lamente un poco el haber permitido que se apartara de mí. Era como mi hermano, habíamos compartido juntos muchas cosas, luchado juntos, mirado casi todo una vida humana, pero el había tenido que irse había vivido muchas cosas y yo también. Habíamos vagado por caminos diferentes en tanto tiempo separados y aun así la venia ahora que tenia dificultades, me parecía tan extraño, sinceramente esperaba que después de irse hubiese podido hallar su propio destino.

Lo mire con cierta extrañeza, por sus ultimas palabras, las cuales me impactaron, todo lo sucedido me había perturbado mucho en verdad, pero no espere que me hubiese cambiado tanto. La muerte de los licanos, el dominio de los vampiros en la ciudad, sé que nada fue lo que esperábamos, los Garras Rojas creían tenían una idea muy equivocada del mundo, pero quizás Arthur no había podido ver lo que yo había visto. Respire y le regale una sonrisa, posando mi mano sobre su hombro.

- Agradezco que hayas venido … me impresiona que hayas podido intuir lo que me afectaba desde tan lejos … disfrutemos de la obra y al salir espero verte, podemos ir a pasear y te contare como esta la ciudad ahora … tu eres mi hermano y desde ahora podrás contar conmigo –mencione en todo amable y gentil, con una gran sonrisa en mis labios, pues en verdad el verlo me había puesto muy feliz, siempre es grato ver a un amigo, después de tanto tiempo. El me había contado parte de todo lo que había hecho en su ausencia, pero debía yo contarle lo sucedido en la ciudad, lo que había pasado en mi vida durante su ausencia. Aprovechar para contarnos las cosas que solíamos contarnos y recordar los buenos tiempos en que estábamos juntos, cuando no había mucho que hacer, cuando éramos almas libres sin preocupaciones siempre dispuestos a defender al Clan en el campo de batalla.

Él tenía razón era mejor salir del teatro, tantas veces ya habíamos visto la misma obra que una mas o una menos no haría la diferencia y debíamos tomar en cuenta que los mortales, deseaban disfrutar de la misma. No interrumpiríamos entonces la diversión de los demás, así que seria mejor solo dejar que los demás la disfrutaran, pues en ese preciso momento era necesario hablar de cosas más importantes. Después de todo cuando en la eternidad vuelves a mirar a un amigo después de tanto tiempo. Salimos del lugar entonces y nos dirigimos a un lugar mas abierto y mas apropiado para poder lograr nuestro objetivo, platicar mucho sobre lo que había pasado en nuestro distanciamiento y mas que nada recordar los tiempos en que éramos tan unidos.

Esa pequeña huida me hizo recordar esos buenos tiempos y sonreí sin pensar mucho en lo demás y solo divirtiéndome, hace tanto tiempo que no salía así para divertirme. Lo seguí, el llevaba un poco la delantera, al llegar al lugar mire hacia arriba al árbol que me menciono y sonreí al escuchar sus palabras, sin darle mucha importancia a las mismas, ascendí rápidamente a la punta, sin dejarle mucho tiempo a decir algo. La verdad estaba algo entusiasmado, pues hace tanto que no salía a divertirme como una pequeña niña, era tan relajante y la verdad me sentía tan despreocupada del resto del mundo y de todo lo que sucedía en el lugar.

- Vamos date prisa, no te dejare ganar –agregue deteniéndome un minute en una parte del árbol, para luego continuar subiendo, siempre habíamos sido como parte de una familia. Tenía mucha confianza en mi amigo y me alegro mucho el verlo después de tanto tiempo, quizás esta vez podría ganarle en su juego, pues recordaba bien que muchas veces no lo lograba. Habían cambiado tantas cosas en tanto tiempo, pero que es el tiempo para los inmortales, sino solo un espacio perdido que debemos aprovechar.

El tenia razón, no me estaba divirtiendo lo suficiente, estaba pensando en lo que habían mencionado los ancianos y cuando llegaran, sabría la decisión, no podría mentirle el me conocía mucho mas de lo que creía. Respire levemente y le sonreí, pero intente ser discreta, tras escucharlo, quería hablar y comentarle lo que sucedía pero en ese momento el teléfono sonó, el leyó el mensaje. Me impresiono un poco saber que uno de sus parientes estaba aun vivo, eso me alegro, él no estaba ya tan solo como solía pensar.

- Estoy un poco pensativa, al parecer los ancianos tomaran una decisión drástica … creo que me tendré que casar con el líder de los Fenrir … estoy un poco nerviosa por ello, no lo conozco mucho y bueno todo lo que sucede en la ciudad es muy confuso … hay que estar alerta en todo momento –respire un poco mas calmada quizás lo poco que dije era algo bueno, poder liberar mi alma de un poco de ese peso en mi mente me hizo sentir mucho mejor, le sonreí y luego lo mire por un minuto. Recordé los días en que jugábamos juntos, las cosas que habíamos pasado, me sentí como una niña, nuevamente en esos días de mi vida junto a mi amigo. Él era como mi hermano, no puede evitar sentirme nostálgica por ese mismo hecho.

- Seria agradable conocer a tu Hermana … tu siempre pensaste estar solo, tienes una hermana … deberás contarme como la encontraste ehh –agregue mirando a Araphiel, estaba contenta por ello, contenta por mi hermano, después de todo sus alegrías eran las mías.